1.- La subida de las pensiones programadas por el gobierno “progresista” del PSOE y SUMAR vienen a continuar empeorando las condiciones de vida de pensionistas y trabajadores. La subida del 2,8 % no compensa ni mucho menos la importante subida experimentada por los productos alimenticios, combustibles y otros gastos de la vida cotidiana. En todo caso, esta precaria subida viene a aumentar la pérdida de poder adquisitivo de las pensiones que recae muy especialmente en las personas que cobran las pensiones de viudedad o mínimas que son irrisorias y no alcanzan para sobrevivir, no superando en un 70 % de los casos los 500 euros. Con estos míseros ingresos muchas pensionistas se encuentran en una situación de pobreza y en la exclusión social.
2.- Los Planes de
Pensiones de Empleo vienen a agudizar la situación con el desvío de recursos públicos y salarios diferidos
hacia entidades financieras, debilitando el sistema público de reparto. Estas
medidas presentadas por la propaganda gubernamental y la patronal como
garantías del mantenimiento de las pensiones, en realidad son formas de
promocionar el negocio y los beneficios de la banca y fondos de inversión.