miércoles, 4 de diciembre de 2024

LOS DERECHOS SE CONSIGUEN CON ORGANIZACIÓN Y MOVILIZACIÓN SOCIAL

La Constitución Española, en su artículo 47 se refiere al derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada, pero hace tiempo que este derecho colisiona con el libre mercado, es decir, con el hecho de que la vivienda es un negocio por encima de todo. Ante el cumplimiento práctico del artículo en cuestión el gobierno progresista es incapaz de darle solución.

 Del mismo modo, carece de valor práctico el párrafo constitucional que señala “Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho (a la vivienda), regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación”.

 A lo largo de los años se viene poniendo de manifiesto la insensibilidad de los gobiernos para atender las necesidades de recursos habitacionales que sufren especialmente los grupos sociales más pobres; de este modo, el derecho a la vivienda, el derecho a tener un techo al que poder llamar hogar encuentra serias dificultades, no se puede realizar sin tener que empeñar en ello una parte del salario y sin miedo a que te expulsen de un día para otro.

 Las viviendas que se construyen suelen ser muy pocas ante el número de familias solicitantes y, en algunos casos, siguen hasta su adjudicación definitiva un periplo sinuoso y complicado que dura varios años, desde la planificación inicial, proyectos, construcción, paradas y vuelta a comenzar, retrasos, lentas adjudicaciones, etc. La crisis de la vivienda que afecta especialmente a los sectores sociales más débiles económicamente está creando poco a poco una ola de indignación a la que ninguna administración pública da solución.

 El derecho a la vivienda al igual que el derecho a la salud y a la educación tiene que ser universal, gratuito y de calidad. Lo cierto es que mientras la vivienda siga siendo una mercancía será imposible alcanzar este derecho. La gente debe tener en el horizonte que el acceso a la educación y a la sanidad se consiguieron después de muchas movilizaciones sociales, el derecho universal y gratuito a una vivienda digna se conseguirá en la medida que se siga el mismo camino.

 Que nadie espere que quienes dirigen las administraciones públicas por su propia iniciativa van a plantear soluciones a este problema, se moverán cuando vean como la gente se organiza y reivindica. Al contrario, harán todo tipo de discursos para quitar las ganas de pelea y movilización y fomentando que la gente espere pacientemente en sus casas. ¿A qué?

 

 

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario