sábado, 29 de octubre de 2022

SOBRE LA REDUCCIÓN DEL NÚMERO DE PEONADAS

 



El Consejo de Ministros ha aprobado una nueva reducción del número de peonadas que se requieren para acceder al subsidio y renta agraria en Extremadura desde el 1 de noviembre de 2022 hasta el 30 de Junio del 2023. La cantidad de jornadas cotizadas para acceder a estas prestaciones se rebaja a 10 hasta junio de 2023, pudiendo acceder al cobro durante unos meses de 460 €. Si bien se establecen el cumplimiento de ciertos requisitos según la edad y el tiempo de acceso a la cartilla agrícola. En la exposición de motivos del decreto se indican las razones que llevan a esta reducción de las peonadas. Así, se espera un descenso de la producción de la práctica totalidad de los grupos de cultivos analizados, por fenómenos climatológicos, especialmente en el olivar, cultivo que demanda una gran cantidad de mano de obra. Es por ello que se reduce el número de jornadas de 35 a 10 para que las personas trabajadoras agrarias eventuales, en las Comunidades Autónomas de Andalucía y Extremadura, puedan acogerse al subsidio de desempleo y la renta agraria, dada la afección de esta situación a sus posibilidades de empleo. Además, Esta circunstancia, sumada al evidente impacto que los aranceles internacionales y los problemas ambientales que han afectado a la cosecha de las actividades oleícolas –predominantes precisamente en el territorio de ambas regiones–, justifica sobradamente la necesidad imperiosa e inaplazable de reducir el número de jornadas exigidas para acceder a ambas prestaciones, en línea con lo que en ocasiones similares se ha venido acordando.

No obstante, conviene realizar algunas precisiones:

1.- El inicio del régimen de protección de los trabajadores eventuales compuesto por el Subsidio Agrario, la Renta Agraria y los Planes de Empleo Rural se conforma desde el periodo de la Transición con el objetivo de neutralizar las reivindicaciones que históricamente venían realizando los jornaleros de la Reforma Agraria.

 La irracional y desigual estructura de la propiedad agraria en Andalucía y Extremadura provenía de la reconquista en el período medieval y su mantenimiento posterior a lo largo de los años, lo que ha ocasionado situaciones de enormes desigualdades sociales, explotación brutal con pobreza y miseria de la clase obrera agrícola.

En 2021 se acogieron al subsidio agrario unas 12.259 personas en la comunidad autónoma extremeña, según el IECA, la mayoría mujeres.

2.- Mediante este sistema de protección social se mantienen disponibles jornaleros y jornaleras agrícolas para ser empleados temporalmente por la burguesía agraria en el campo y para otros empleos coyunturales en la hostelería y la construcción.

3.- La reducción de las peonadas para el cobro del subsidio es una medida que deja las cosas tal y como están, aptas para continuar con la sobreexplotación de la clase obrera agrícola en el medio rural, y dando vía libre a que sigan el acaparamiento de la propiedad de la tierra por los latifundistas de toda la vida, la penetración de fondos de inversión extranjeros y nuevos ricos, propietarios de las industrias de transformación de productos hortofrutícolas reconvertidos en terratenientes.

La gran propiedad agraria no ha dejado de crecer. Además de que con este sistema perduran y se reproducen otros problemas asociados como las redes clientelares, la obligación de comprar peonadas, los jornales en negro y la economía sumergida. A pesar de nuestra disconformidad con una medida que acelera e intensificaba las desigualdades sociales en el mundo rural, dada la situación actual de crisis y desempleo, esta reducción de peonadas va a permitir que muchas familias puedan disponer de unos mínimos ingresos para sobrevivir.

 4.- Las Organizaciones sindicales y políticas del reformismo pretenden utilizar esta medida para vender las presuntas bondades del gobierno «de progreso» español y seguir engañando al Pueblo Trabajador Agrario. Les recordamos que el gobierno PSOE-UP no ha ido mucho más allá que gobiernos anteriores que redujeron hasta 20 las peonadas necesarias.

5.-No hay que dejar de entender que la naturaleza de la renta y subsidio agrario suponen un pequeño presupuesto para el estado pero que en el fondo significan y se plantean como una limosna para comprar la paz social en el campo, garantizar la dominación de clase de la burguesía asegurándole mano de obra para las explotaciones agrarias a precio de ganga que fácilmente se acompañan de fenómenos como el trabajo en negro, la compra de firmas, etc.

6.- El remedio a los problemas del proletariado agrario pasa por la Reforma Agraria y por otras medidas imprescindibles para sostener la producción agraria y el mundo rural extremeño, como:

Participación de Extremadura en los beneficios de todas las empresas que operen en nuestra región o vendan aquí sus productos.

Exigencia de preferencia para el consumo de los productos extremeños

Impulso desde el gobierno regional a la formación de cooperativas de trabajadores agrícolas.

Fin de la privatización de las tierras de titularidad pública a través de subastas. 

Cesión de las tierras públicas para su explotación a cooperativas de trabajadores/as.

Política de incremento del patrimonio agrario público extremeño con una partida anual en los presupuestos regionales.

Regulación del derecho de tanteo de la administración pública en las subastas de terrenos agrícolas.

Cesión de las tierras de titularidad pública de cualquier administración a cooperativas asociadas de trabajadores/as. 

Protección del pequeño campesinado de los oligopolios de la comercialización de productos agrarios fomentando la introducción de empresas comercializadoras públicas y precios justos para las cosechas. 

Expropiación de fincas por motivos sociales, infrautilización o cultivos lesivos con el medio ambiente.

Aplicación del Impuesto de Tierras Infrautilizadas (aprobado en la Ley de Reforma Agraria 3/1984 y nunca puesto en práctica).

Diseño y planificación de un proceso de industrialización organizado y dirigido por la Junta de Extremadura acorde con las necesidades del Pueblo Trabajador Extremeño.

 

La manipulación política sobre la base de los datos del paro

 

El PSOE extremeño se ha lanzado a una campaña política apoyado en lo que considera buenas noticias sobre los últimos datos del desempleo en la región, y en las perspectivas de futuro que ofrecen los 1.000 millones de euros de los fondos europeos que según el jefe del ejecutivo regional y la ministra Calviño tiene consolidados Extremadura. Partiendo de estas premisas, destaca su ejecutoria política de gobierno frente a la del PP, puesto que ahora hay un número de parados mucho menor que los que había cuando gobernaba el PP.

La campaña forma parte de una de mayor extensión que van a realizar todas las terminales del poder para contrarrestar las dificultades que está teniendo ya y van a seguir creciendo en un futuro inmediato del sistema capitalista para mantener la cohesión social en el interior del país y a otros niveles extranacionales. Quizás sea necesario tomar como punto de partida el hecho fundamental de que los fondos europeos no son gratuitos, y con ellos hay unos compromisos del gobierno con la UE.

Las crisis de las economías capitalistas, agudizadas por la guerra y la pandemia del COVID, han obligado a los países europeos, organizados en la UE, a la petición de préstamos a los mercados financieros para hacer frente a la crisis.

La mayor parte de los fondos europeos de recuperación y resiliencia están siendo destinados por los estados europeos como ayudas y subvenciones para que las grandes empresas nacionales y multinacionales reorganicen y modernicen sus medios de producción

Para acceder estos préstamos y subvenciones, los gobiernos se han comprometido con la UE a una serie de recortes sociales en materia de pensiones, reformas laborales, reducción de servicios públicos, salarios, etc. Por tanto, los dineros que recibirán las Comunidades Autónomas no van a venir de modo gratuito como una lluvia caída del cielo, ni vienen gracias a las buenas gestiones de nuestro gobierno regional, sino que estos préstamos y ayudas se corresponden con unos compromisos políticos y unas devoluciones dinerarias que antes o después deberemos pagar las clases trabajadoras, a pesar de toda la propaganda mentirosa que se está haciendo sobre los mismos.

En este marco general se encuentra la necesidad de la manipulación propagandística que realiza el PSOE con los datos del paro. Esta tiene un recorrido meramente electoralista, implora el parlamentarismo banal que nunca acabará con la pobreza relativa ni mucho menos con la explotación;  ni ahora ni antes, tanto el gobierno regional del PSOE como el del PP, cuando en su momento lo fue, jamás han estado al servicio de los intereses del pueblo trabajador extremeño. 

1.- En primer lugar, las políticas realizadas para combatir el desempleo regional han sido y son débiles y muy superficiales siempre con fondos públicos sin tocar ni molestar los bolsillos de personas y entidades ricas y poderosas, no atacan las raíces ni las causas estructurales que generan el atraso económico y el elevado paro que padecemos, por tanto, incapaces de responder a coyunturas económicas negativas que se reflejan y arremeten con fuerza en regiones sin una estructura sólida productiva como es la extremeña.

2.-Los gobiernos del PSOE en Extremadura tienen bien poco que destacar en cuanto a lucha contra el paro y el bienestar de la población trabajadora puesto que no han atendido asuntos fundamentales para la población extremeña, ni tampoco han transformado las estructuras productivas, económicas y sociales de la región. No se han preocupado de las construcciones de viviendas, ni de una reforma agraria de apoyo a los agricultores y ganaderos, no hay una planificación económica que apoye a las pequeñas y mediana empresas, ni hay interés en la creación de unas bases para el desarrollo industrial autónomo sin esperar a mecenas que vengan del exterior a resolvernos los problemas, ni tampoco políticas forestales. etc.

3.- La clase obrera extremeña no tiene que agradecer nada al gobierno de VARA que ante tanta precariedad y dificultades económicas se ha limitado a seguir mecánicamente con acciones muy insuficientes para combatir la pobreza y la exclusión social. No se ha pasado de la distribución de pequeñas cantidades de fondos públicos a los ayuntamientos para un raquítico empleo social, ayudas a domicilio de miseria, mínimos vitales, talleres de formativo sin garantías de empleo futuro, gratificaciones al transporte público, etc., En definitiva, son acciones que se han querido vender con mucha publicidad pero que no sobrepasan el carácter caritativo para evitar conflictos, pero sin atacar las raíces y las causas que dan lugar a estos graves problemas que sufre la humanidad trabajadora extremeña.

4.- El gobierno de VARA ha dado por bueno y ha sido sumiso ante todo lo que viene y se decide en Madrid. Ha aceptado sin rechistar los fondos que proceden de los presupuestos del Estado totalmente insuficientes para atender la tan necesaria mejora en cantidad y calidad de los servicios públicos de la sanidad, la educación, los mayores, y los dependientes.

5.-El gobierno socioliberal del PSOE ha seguido mecánicamente la dictadura del capital adoptando normativas económicas y administrativas en buena sintonía con los intereses de las grandes compañías eléctricas y otras grandes empresas que se están apropiando de los recursos naturales de estas tierras. El gobierno del PSOE no sólo mantiene, sino que también ha promocionado entre la población trabajadora una sumisión irracional y alienadora ante los dueños de estas corporaciones explotadoras que lo único que quieren es obtener altos beneficios. El PSOE ha estado impidiendo que las clases trabajadoras dieran el salto desde las políticas reformistas a las revolucionarias.

La experiencia nos dice que cuando alguna gran empresa se instala en nuestros pueblos, favorecidas por las condiciones generadas por el gobierno regional, llevan a cabo una enorme acumulación de capital como resultado de la imposición de una brutal explotación laboral, sin paliativos, sin la menor piedad, ante el silencio absoluto de los sindicatos oficiales del régimen monárquico y con el visto bueno de las instituciones de la Junta y del Estado que no ejecutan control alguno de las condiciones laborales y ambientales. 

6.- Desde UED-PSLF consideramos que ahora al elaborar los presupuestos regionales se tengan en cuenta con carácter prioritario políticas en las que se contemplen: la creación de una Banca Pública, la potenciación cuantitativa y cualitativa de los servicios públicos de la sanidad, la educación, la atención a mayores y dependientes, la construcción urgente de viviendas sociales y la programación de políticas de empleo estables y creadoras de riqueza, así como medidas que den apoyo a pequeñas y medianas empresas regionales y a los agricultores y ganaderos.

 

martes, 25 de octubre de 2022

SOBRE LAS AYUDAS SOCIALES EN LOS PRESUPUESTOS REGIONALES (I)



Una Extremadura Digna-PSLF (UED-PSLF) exige a la Junta de Extremadura y a los partidos políticos de la Asamblea que en los nuevos presupuestos municipales se incrementen las cantidades que las familias extremeñas cobran por la renta de inserción extremeña (renta básica extremeña) y se complementen las cantidades del Ingreso Mínimo Vital hasta llegar al Salario Mínimo Interprofesional. La subida de los precios de los alimentos y combustibles imposibilitan que familias con 500 o 600 euros puedan vivir dignamente. Además, se deben incrementar las cantidades destinadas a los mínimos vitales para que la gente pueda responder a los desorbitados precios de la luz.

Por otro lado, es necesario complementar hasta subir las pensiones, mínimas y no contributivas hasta el salario mínimo interprofesional. Hay personas mayores que están cobrando cantidades ridículas que apenas tienen para alimentarse y viven en situaciones próximas a la miseria.

Las buenas noticias que el presidente de la Junta, Fernández Vara, y la ministra Calviño han dado hace unos días respecto a que tenemos para la región extremeña unas cantidades consolidadas de 1.000 millones de euros, abren perspectivas para mejorar la vida de los extremeños. En todo caso, lo que no deben hacer ni consentir nuestros dirigentes institucionales es que estos dineros sean dirigidos, mediante ayudas y subvenciones, a las grandes empresas que actúan en la región, mientras que los municipios, pequeñas empresas autóctonas y la población trabajadora en general accede a pequeñas migajas que se conceden para taparnos la boca.