Una de las obras que
la Junta de Extremadura debe desarrollar en esta legislatura es la del Instituto
de Villafranca de los Barros.
En los primeros años de los 90, si no recuerdo mal fue en el
92-93, se produjo “el cambio” entre el Colegio Rodríguez Cruz y el Instituto
Meléndez Valdés; es decir, nos intercambiamos en la ocupación de los edificios.
Los alumnos de primaria (antigua EGB) que daban clases en el Colegio Rodríguez Cruz
pasaron al edificio que utilizaban los alumnos de bachillerato. En ese período
y en años sucesivos, se produce una ampliación del Instituto con la
construcción de edificaciones destinadas a la impartición de clases para el alumnado del
bachillerato y COU, y de los diferentes
ciclos formativos que poco a poco se van implantando en el Centro Educativo.
A estas alturas, nos encontramos con varias bloques, por
llamarlos de algún modo, en dónde se dan las clases que corresponden a la ESO
(antiguo edificio del Colegio Rodríguez Cruz), Bachilleratos, Ciclos de
Administración y Finanzas, Electricidad y Electrónica y Automoción en sus
diversas ramas, enseñanzas del Nocturno, EPA (escuela de adultos) y otras enseñanzas
no regladas.
En definitiva, Villafranca de los Barros, necesita un nuevo
edificio que albergue un Centro Moderno con espacios físicos suficientes para mantener
y, por supuesto, mejorar la calidad educativa que desarrolla en las múltiples
enseñanzas para los cientos de alumnos de las diferentes localidades, no sólo
de Villafranca, que cursan los estudios en nuestra localidad.
Desde hace varios años se viene solicitando la nueva
construcción; sabemos del esfuerzo que realiza el actual equipo directivo para
conseguir que por las autoridades político-administrativas se tenga en cuenta lo
que desde el punto de vista educativo es una necesidad y una proyección pública
de la localidad. Por eso, no puede pasar una legislatura más sin que desde la
Junta de Extremadura se atienda esta petición muy mayoritaria que realizan las organizaciones
políticas y sociales de la localidad.