En el primer trimestre del
2016, desde Europa Laica, a la que pertenece la Organización en Defensa de lo
Público, se ha iniciado una campaña que tiene como objetivo la defensa y el
fomento de la libertad de conciencia de todas las personas, así como establecer
la legitimidad secular (civil) de las instituciones públicas, en el ámbito
municipal.
Hay que tener en cuenta que
los municipios constituyen hoy una avanzadilla de los cambios sociales y son
los que están haciendo avanzar más al conjunto del Estado haciendo las
propuestas más rupturistas y de cambio social con multitud de iniciativas como
la Red de Ciudades Refugio, el No al TTIP, por el bienestar animal o la red de
ciudades por el cambio en Salud.
Esta campaña encaminada a la
constitución de una RED DE MUNICIPIOS POR UN ESTADO LAICO, se acoge a lo que
establece el art. 16.3 de la Constitución Española, sobre la NO CONFESIONALIDAD
DEL ESTADO y por tanto, que ninguna confesionalidad tendrá carácter estatal. Es
decir, el Estado no tiene confesión alguna y los ayuntamientos son parte
fundamental del Estado.
La laicidad en
el ayuntamiento es una manera de representar a toda la ciudadanía y no sólo a
una parte de ella con unas determinadas creencias religiosas, por lo que ninguna autoridad pública o funcionario participará, en calidad de tal, en
actos de naturaleza religiosa.
Esto obliga a una serie de
comportamientos a los representantes de los diferentes partidos políticos, ningún partido debiera asistir con carácter oficial a eventos
religiosos, sino también a que los miembros de la
corporación local y el personal al servicio de la administración municipal no
mostrarán, en el ejercicio de su cargo o de sus funciones, ningún gesto de
sumisión o veneración de personas o imágenes religiosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario