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Antes de entrar de pleno en el contenido
de esta comparecencia, quiero sumarme, en nombre de esta Agrupación Local, al
recuerdo de Miguel Ángel Blanco en manifestación de una total repulsa a aquel
asesinato, para recordar también a todas las víctimas del terrorismo, a sus
familias, demostrando así una fe inquebrantable por la libertad y en el libre
ejercicio de nuestros derechos que nuestra Constitución ampara y protege en
este sistema democrático que entre todos nos hemos comprometido a defender y a
desarrollar como construcción de una sociedad más justa y solidaria.
Malos augurios y peores datos. El Informe de Progreso de
la región elaborado por la Fundación Caja Extremadura es una sucesión de
cifras, análisis y conclusiones con tintes de verdadero pesimismo. En
el mismo se habla de "descalabro" de la ocupación, aumento del paro,
elevado déficit público, caída de la productividad y bajo porcentaje de
población cualificada entre otros asuntos.
También se alude a los ajustes presupuestarios. Como ha
reconocido esta mañana José Antonio Herce, de Analistas Financieros
Internacionales, en Extremadura "necesariamente tendrán que causar más
impacto" que en otras comunidades debido al elevado peso del sector
público en la economía.
"El problema es que la presencia del sector público es la
más elevada" de todas las regiones, advierte Herce, que ha subrayado
cuestiones como la elevada tasa de temporalidad, 10 puntos por encima de
la nacional, o el hecho de que en Extremadura haya una vacante de
empleo por cada 140 parados, frente a la relación 1-73 nacional o 1-10
de los países avanzados.
Extremadura fue la "única comunidad autónoma en la que el
PIB se redujo en 2011", un 0'3%. También fue en la que más se redujo la
ocupación.
Por primera vez se produce "divergencia en renta por
habitante respecto a España". La parte positiva es que Extremadura
seguiría siendo región de convergencia en el horizonte 2014-2020 y por
tanto recibiría nuevos fondos europeos.
El informe también analiza nuevos proyectos
empresariales, como el de la Refinería. "La importancia de esta
instalación contribuiría a reducir el tradicional déficit comercial
español", señala. Y concluye: "Podría suponer una importante
modernización del tejido industrial extremeño" además de ayudar a paliar
el déficit energético español.