Como declara el presidente de Europa Laica: La propuesta que han hecho, desde la dirección del PSOE, de subir al 1% la casilla de “fines sociales” de la Declaración de la Renta, es tendenciosa, injusta, confesional y discriminatoria.
Documento con fecha
jueves, 18 de octubre de 2012.
Publicado el
viernes, 19 de octubre de 2012.
Autor: Francisco Delgado. Presidente de Europa Laica.Fuente: Laicismo.org.
Autor: Francisco Delgado. Presidente de Europa Laica.Fuente: Laicismo.org.
La propuesta que han hecho, desde la dirección del PSOE, de subir al 1% la casilla de “fines sociales” de la Declaración de la Renta, es tendenciosa, injusta, confesional y discriminatoria.
Europa Laica viene exigiendo, desde hace años, la desaparición de las casillas, “fines de interés social” y la de “iglesia católica”
del Impuesto sobre la Renta. Primero, porque la destinada a “fines
sociales”, significa la coartada perfecta para “justificar” que, través
del Impuesto de la Renta, se financie el proselitismo, el culto y clero
católicos.
En segundo lugar, porque el Estado no debe ser recaudador de
cuotas y donaciones de personas privadas, que vayan a parar a
fundaciones, asociaciones y entidades privadas.
En tercer lugar, porque
se detrae un dinero del impuesto de la renta, casi el 70% del 0,7
total (fines sociales e iglesia católica), que va a parar a entidades y
asociaciones religiosas, a la Conferencia Episcopal, a fundaciones y
entidades, algunas de las cuales, son cautivas de intereses partidarios e
ideológicos, en vez de financiarse infraestructuras y acciones sociales
de interés común directamente por el Estado.
En cuarto lugar, y quizá
la más fundamental para un Estado Social y de Derecho, porque los fines sociales, por su enorme importancia y trascendencia,
deben ser definidos por el Parlamento y los órganos legislativos
territoriales correspondientes y formar parte de la política de Estado,
sin delegar, de antemano, en asociaciones, entidades, fundaciones, etc.
La diferencia entre ricos y pobres se agranda muy progresiva y
alarmantemente, el nivel de personas que están en el umbral de la
pobreza en España se acentúa. El Estado tiene el deber de procurar los
medios económicos y políticos para aminorarlo y evitarlo, con políticas
fiscales justas y compensadoras de desigualdades; creando servicios
sociales públicos eficaces y no potenciando la caridad, frente a la
justicia social; invirtiendo, mucho más, en Educación, ciencia y
tecnología y en los sectores sostenibles de la economía productiva;
evitando que la “pobreza” sea un espacio en el que organizaciones
religiosas o de otra naturaleza ideología hagan proselitismo y política
y, además, con dinero público.
Y por último, expresar nuestro malestar por esta propuesta del PSOE en
la campaña electoral gallega, además de que se sale del contexto de
competencias autonómicas,porque si esta “ocurrencia” fuera hacia
adelante, además de su nula trascendencia, para corregir la “exclusión
social”, correríamos el riesgo, en estos momentos políticos, de que se
aumentara la financiación pública de la iglesia católica oficial, es
decir de la Conferencia Episcopal.
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